El grupo Swatch no sólo deja de vender ébauches, también calibres, agujas, cajas...
Nuevo órdago de Hayek cuando todavía no está claro si le va a salir bien lo del cierre de grifo de los ébauches. No sólo quiere dejar de suministrar los mecanismos incompletos, también los ETAs o Valjoux sin modificar, cajas, cristales, agujas...
Ésto es lo que ha dicho a un periódico de Ginebra.
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Traducido con Google
Swatch Group dejará de ofrecer sus productos a la competencia
Nicolas Hayek, declara formalmente en una entrevista en Agefi "Este sería un punto de inflexión para toda la industria".
Nicolas Hayek lanza una bomba cuyos efectos podrían socavar la industria relojera suiza en su conjunto. El presidente de Swatch Group "quiere dejar de participar en los componentes del reloj de la competencia producida por su grupo. Esto no significa que los mecanismos de relojería o proyectos, sino también todos los demás productos fabricados por sus sociedades industriales, tales como agujas, cajas u otros componentes de relojes. Estas piezas son de alto valor estratégico, sin embargo, son producidos por un pequeño número de otros proveedores en Suiza. La gran mayoría de fabricantes de relojes en el país de hecho debe pasar por Swatch Group para un componente, o todos. El patriarca del grupo dijo que se sentía "cansado, molesto, enojado", contra los procedimientos eternos que lanzan contra el grupo terceras marcas, sus competidores. Dijo que habitualmente se dedican a denunciarle a la Comisión Federal de Comercio o de Justicia cada vez que el Grupo Swatch toma una decisión de ningún tipo. La información que parece poco probable, el tema que más explosivo. Lo mismo vale para el futuro de reloj "Swiss Made". Follones garantizados. Sin embargo, dice Nicolas Hayek está más decidido que nunca. "Estas no son las amenazas", dijo en una entrevista en L'Agefi. Asimismo, pedirá a la autoridad antimonopolio para pronunciarse sobre el tema y decir, en qué condiciones y qué tan pronto, Swatch Group se aplique su decisión. De todo un equipo de trabajo en otros lugares dentro del grupo de Biel para completar lo que puede ser una revolución para la industria. Nicolas Hayek, sin embargo, niega haber intentado matar a la industria relojera suiza. "Para que los competidores establecezcan su propia base industrial", declaró él. A los amigos fieles del grupo, incluyendo las marcas que no han litigado contra ellas, la puerta permanecerá abierta. La Navidad puede tener un sabor amargo para muchos relojeros.
Artículo original.
Swatch Group ne veut plus livrer la concurrence
Nicolas Hayek le déclare formellement dans un entretien à L’Agefi. Ce serait un tournant pour toute la branche.
Nicolas Hayek lance une bombe. De celles dont les répercussions risquent d’ébranler l’industrie horlogère suisse dans son ensemble. Le président de Swatch Group «veut arrêter de livrer à la concurrence des composants horlogers produits par son groupe». Il ne parle pas que des mouvements de montres ou des ébauches, mais aussi de l’ensemble des autres produits fabriqués par ses sociétés industrielles, comme les aiguilles, boîtiers ou autres organes règlants des montres. Ces pièces, hautement stratégiques, ne sont pourtant produites que par un nombre restreint d’autres fournisseurs, en Suisse s’entend. L’écrasante majorité des horlogers du pays doivent en effet passer par Swatch Group pour un composant ou un autre, voire tous. Le patriarche de l’horlogerie se dit «lassé, agacé, en colère» suite aux éternelles procédures lancées contre son groupe par les marques tierces, ses concurrentes. Selon lui, elles engagent systématiquement des actions auprès de la Commission de la concurrence ou de la justice chaque fois que le Swatch Group prend une décision, quelle qu’elle soit. L’information paraît invraisemblable, le sujet étant des plus explosifs. Il en va même de l’avenir du Swiss made horloger. Tollé garanti. Pourtant, Nicolas Hayek se dit plus déterminé que jamais. «Ce ne sont pas des menaces», a-t-il déclaré lors d’un entretien à L’Agefi. Il va demander à l’autorité anticartellaire de se prononcer sur le sujet et dire, dans quelles conditions et quel délai, Swatch Group pourrait appliquer sa décision. Une équipe entière travaille d’ailleurs au sein du groupe biennois pour mener à bien ce qui risque d’être une révolution pour la branche. Nicolas Hayek se défend toutefois de vouloir tuer l’horlogerie suisse. «Aux concurrents de mettre en place leur propre appareil industriel», proclame-t-il. Pour les amis fidèles du groupe, comprenez les marques sans contentieux, la porte pourrait rester ouverte. Le Noël de beaucoup d’horlogers risque d’avoir un goût amer.
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