Viejos tiempos aquellos en los que la marca hacía relojes tan bonitos como el que nos presentas. Ahora, estética, estética y estética. Recuerdo cuando iba a Andorra y me quedaba embobado con los "El Primero" de Zenith -tengo testigos por aquí-.
(Estaba vacío, porque acabamos de empezar, hombre) Gracias Miguel, por llenar los huecos y presentarnos tus increibles piezas.![]()