La sola visión del calibre y la esfera ya te anticipa que el reloj resultante puede llegar a lo más alto del cielo, al cenit.


Tras el inevitable paso por las manos de Javier el aspecto ya te permite tocar el cielo sólo con ponértelo


La firma de Unitas ha sido borrada de debajo del volante, y los acabados del calibre son realmente excepcionales. La esfera original, de factura clásica, destaca por el segundero a las 6 sobredimensionado, de 15 mm de diámetro. Renuncié a las doradas agujas de origen para optar por las diamantadas que Epicuro150 reservaba para alguna ocasión especial. Son enormes, la de las horas es de pica, y llenan a la perfección la gran esfera del Zenith


Para asir bien a la muñeca la pieza que debe de llevarte hasta arriba,… piel de perca del Nilo abrochada con una hebilla firmada por Zenith. Los reflejos y los diversos tonos del azul son el toque atrevido en una pieza cásica