Yo cuando llego a casa suelo quitarme el que llevaba en la calle, pero para ponerme otro... Y para dormir también me lo quito, porque siempre, desde hace muchos años, duermo con un gshock, así que me los voy quitando, pero siempre tengo uno puesto, excepto en la ducha. Es fácil que en un sólo día me haya puesto tres o cuatro relojes diferentes.