Estaba tan tranquilamente durmiendo, cuando a las 9 y pico de la mañana suena el portero. ¡Un sábado!.
Vamos a ver que es:
Abro esta caja y contiene otra de cartón.
Y después otra...
Hasta llegar a la caja de peral en cuestión.
Vamos a ver su contenido. Un precioso PAM 359.
Y lo que hice a continuación fué llevarlo de cabeza, tras la consiguiente carga de cuerda, a ver como se portaba, al potro de torturas relojero, llamado cronocomparador.
Entremos en harina. Unas cuantas fotos en varias posiciones. Me ha costado mucho hacer alguna foto decente, todo brilla y se refleja ...
Lateral de la caja:
Calibre:
Y la clásica foto para ver como queda una vez puesto.
Mi especial agradecimiento a Picón, por hacer posible, con su mediación, que este reloj esté en mi poder y a todos los que me han ido ayudando con sus opiniones a dar el paso final.
Saludos.