Martes 22 de diciembre de 2009
El cielo vuelve a estar
gris.
Estoy hasta las narices de tanta agua. Agua, agua y más agua. Cielo
gris.
Pero
gris..., de cohone. Como diría algún mohicano sevillano.
Esto es deprimente.
Situación que sólo puede ser salvada porque...
dentro de una hora escasa, me tocará la lotería.
Aunque pensándolo bien..., tampoco es que lo que me pueda tocar sirva para mucho. Es más, para nada. Es igual. Que Dios reparta dinero a los que verdaderamente lo necesiten y a mi..., con la salud que me ha tocado, me es más que suficiente.
Oye..., pero
gris de cohone!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!