Pues eso, que no es la primera vez que me pasa, que cuando junto el dinero para algo que tenía pensado a última hora hay cambio de planes...
Como sabéis iba de cabeza a por el Seawolf, pero ya dije lo que sentí al verlo en directo (desde entonces Roca no me habla...) y resulta que el otro por el que tenía dudas, el Chronospace me ha parecido una paellera, por lo que estoy descolocado.
Tengo en cabeza el Aerospace, pero no sé, no lo he visto y tengo miedo de que me decepcione por un motivo o por otro como me ha pasado con los anteriores.
Me tira mucho para atrás el titanio, los 42mm y las agujas tan "palo" no me van mucho. El resto me gusta la verdad, me parece un reloj que cambia muchísimo de una correa a otra, y es casi ideal para cualquier época del año. Pero siempre llegando el veranito me apetece algún diver con algo de color, algo "tocho", y el Seawolf es cualquier cosa menos colorido y tocho.
No sé qué hacer coño, tengo los durillos en el bolso y no sé qué hacer, casi era mejor cuando no controlaba las crisis de compra impulsivas, qué bien me lo pasaba!... hasta que me arrepentía después.
Pero esto de asegurar las compras, puf, coñazo, además, por qué será que siempre me gusta lo más inaccesible?? claro que hay relojes que me gustan, pero pasan los seis mil y me prometí a mí mismo no volverme a gastar tanto.
Tengo de límite unos 3.000 y no sé qué hacer, como si fueran dos duros... manda huevos.
Me corto las venas o me las dejo crecer???