Jordiher
19/07/11, 17:06
Fuente: inforeloj.com (http://www.inforeloj.com/index.html)
http://www.inforeloj.com/spa/item/extractimg.cgi?action=normal&code=historia_piaget
En 1874, Georges-Edouard Piaget fundó un pequeño taller relojero en la granja que su familia poseía en la pequeña población de Côte-aux-Fées, en el corazón del Jura suizo. Ahí empezó a fabricar movimientos relojeros de gran calidad y alta precisión, que le permitieron hacerse un nombre rápidamente en el sector relojero. Al cabo de poco tiempo, Piaget elaboraba calibres para las grandes casas de relojería suiza.
Fiel a los principios que le habían valido el reconocimiento general, y siguiendo la consigna de “hacerlo siempre mejor de lo necesario”, Piaget se caracterizó por buscar siempre la excelencia técnica, como también lo hizo Timothée Piaget desde 1911, cuando se hizo cargo del taller. Pero sería unas décadas más tarde, y con la tercera generación de la familia Piaget al mando de la empresa, cuando ésta dio el gran salto de calidad y, sobre todo, de popularidad.
http://www.inforeloj.com/spa/item/resource/historia_piaget/georges-edouard_piaget_625.jpg
Georges-Edouard Piaget, fundador de la manufactura.
En 1943, Gérard y Valentin Piaget, nietos del fundador, decidieron registrar la marca, y la manufactura empezó a fabricar y comercializar relojes bajo la denominación Piaget. Paralelamente, los hermanos llevaron a cabo una inteligente política de expansión geográfica de la marca e implantación en el mercado, que consiguió que en poco tiempo los pedidos se dispararan. Como consecuencia de ello, al poco tiempo, la capacidad de producción de la vieja manufactura se mostró insuficiente, y en 1945 hubo que construir otra fábrica en la misma localidad.
http://www.inforeloj.com/spa/item/resource/historia_piaget/georges_edouard_piagets_family__625.jpg
La familia Piaget.
Movimientos ultraplanos
Era el principio de una nueva era para Piaget. Las nuevas instalaciones, más allá de permitir el tan necesario aumento de producción, facilitaron la introducción de nuevas técnicas relojeras, que pronto empezaron a dar frutos. Así, durante la década de los 50, los relojeros de Piaget se especializaron en la fabricación de movimientos ultraplanos, otorgando a la marca un papel protagonista en la lucha para reducir el tamaño de los mecanismos: en 1957, la marca de Côte-aux-Fées logró crear un movimiento mecánico de cuerda manual, el célebre Calibre 9P, que con sus 1,35 mm de espesor se convirtió en el más plano del momento. Tres años más tarde, Piaget elaboraba asimismo el Calibre 12P, de 2,3 mm de espesor, que fue en aquel momento el movimiento automático más plano del mundo.
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Calibre extraplano 9P, de sólo 1,5 mm de grosor. Creado en 1957, era el más plano del momento.
Esta pequeña revolución en el interior de los relojes tuvo su traducción en el exterior. Es en esta época cuando Piaget empieza a lanzar relojes con diseños propios realizados exclusivamente con materiales nobles, como el oro de 18 quilates o el platino. La introducción del reloj joya suponía trasladar a la caja la sofisticación formal que Piaget ya había alcanzado con sus calibres; después del reloj moneda, el reloj anillo, el reloj broche y el reloj pulsera, en 1957 Piaget lanzó el modelo masculino “Emperador”, seguramente el primer reloj iconográfico de la marca.
Con el éxito obtenido con este lanzamiento, la firma afirmaba aún más su introducción en el mundo de la joyería. Para ello, fue crucial también la apertura de una nueva manufactura en Ginebra, especializada en este sector. La capacidad de la marca para producir calibres extraplanos facilitaba la elaboración de cajas más pequeñas y ligeras, más adecuadas para la función de reloj-joya, mientras que la posibilidad de contar con una manufactura exclusivamente dedicada a la joyería permitía a sus diseñadores explorar nuevas y revolucionarias formas.
Joyeros de la relojería
Así, a punto de acabar la década de los 50, Piaget ya había adquirido la imagen que la ha hecho famosa, como marca iconográfica en la industria del lujo y la precisión. Significativamente, en 1959 la marca inauguraba su primera boutique en la prestigiosa Rue de Rhône ginebrina.
Con la década de los 60, llegaron las grandes creaciones de Piaget; en 1964, la marca sorprendía al mundo de la relojería con una colección de relojes que por primera vez incorporaba esferas de color con piedras semipreciosas como el lapislázuli, el jade, la malaquita, el ópalo, el ónix, la turquesa o el ojo de tigre. Además, la firma se especializó en los engastados de diamantes y piedras preciosas, lo que se convertiría pronto en una de sus marcas de fábrica.
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Reloj de la colección joyera Limelight.
La llamada revolución del cuarzo de principios de los 70 cambió para siempre la industria de la relojería, y Piaget no fue ajena a este fenómeno. Los nuevos calibres, aún más planos, aumentaban aún más las posibilidades de diseño, y la marca de Côte-aux-Fées aprovechó la oportunidad para consolidarse aún más en el sector del reloj joya. Tal como había sucedido en el ámbito de los movimientos mecánicos, la firma fue pionera en el diseño de mecanismos ultraplanos de cuarzo, como demuestra el lanzamiento, en 1976, del Calibre 7P, el más pequeño de su generación.
Durante todo este tiempo, Piaget acabó de consolidar su imagen como marca clave en el ámbito de la relojería de moda, gracias a la combinación única entre la alta relojería y la joyería, y cada vez eran más las boutiques que permitían descubrir sus exclusivas piezas en todo el mundo. El atrevimiento en los diseños se acentuaba, y la firma se confirmó como pionera a la hora de explorar nuevas vías para convertir al reloj en una obra de arte contemporáneo. Esta línea vanguardista llegaría a su punto culminante en 1979, con el lanzamiento del que es seguramente es uno de los modelos más emblemáticos de la marca suiza, hasta el punto que Piaget lo ha recuperado en varias ocasiones: el Piaget Polo.
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La colección Polo es una de las más famosas de la firma.
Bajo la dirección de Yves Piaget, la marca demostró, durante la década de los 80, que tenía el camino perfectamente marcado, y en 1986 cultivó otro éxito con la comercialización de la serie Dancer. Era el preludio de otro salto para la firma, que en 1988 se unió a varias industrias del sector del lujo para formar el que, más tarde, se conocería con el nombre de Richemont, sin duda uno de los grupos más importantes del mundo de la relojería. Ello trajo cambios a la casa, aunque sin dejar de lado los orígenes y la filosofía de la marca. Así, en 1990, Piaget lanzó su primera colección estrictamente joyera, llamada Possession. Aprovechando el conocimiento adquirido en el arte del engastado, la marca presentó una serie de piezas vanguardistas e innovadoras, que se sucederían durante esa década con colecciones como Miss Protocole (1998) o Limeligh.
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Yves Piaget, Presidente actual de la marca
En el ámbito de la relojería, Piaget volvió a apostar por los relojes ultraplanos, con una pieza sorprendentemente clásica y caracterizada por la pureza de líneas y un diseño minimalista: el famoso Altiplano, comercializado en 1998. Un año más tarde, la marca recorría a uno de sus modelos icónicos de los años 50, el Emperador, para dotarlo de los movimientos más sofisticados de la manufactura.
Finalmente, Piaget lanzó en 1999 la colección Black Tie, una reedición de sus mejores piezas masculinas que mostraba la maestría adquirida por los relojeros de la marca de Côte-aux-Fées durante el siglo que terminaba, a la hora de realizar los más complicados movimientos. Como característica principal, todos los modelos estaban elaborados exclusivamente en oro de 18 quilates –en sus varias tonalidades- y muchos de ellos, por supuesto, embellecidos con diamantes y piedras preciosas, acuradamente engastados por los maestros joyeros de la casa.
El nuevo milenio empezó con fuerza para Piaget, que inauguró en 2001 una nueva y revolucionaria manufactura de alta relojería en un emblemático edificio situado en Plan-les-Ouates, cerca de Ginebra, cuya estructura se inspira en las formas de un reloj.
La nueva fábrica, en cuyas instalaciones se realizan más de 40 oficios de la relojería, nacía con la misión de complementar el trabajo de la manufactura de la Côte-aux-Fées y hacer frente a la nueva expansión de la marca. En sus dos grandes naves de producción, de 2.628 y 1.124 m2 de superficie, se transfirió el conjunto de las actividades y procesos de producción de Piaget, además de un taller dedicado a la fabricación de prototipos y un servicio posventa. Como muestra del carácter dual de la firma a lo largo de la historia, la producción estrictamente relojera convive con la creación de joyas de alta relojería. Sin embargo, el diseño y fabricación de movimientos, principal actividad de Piaget y su buque insignia, sigue teniendo lugar en la sede histórica de la Côte-aux-Fées.
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Entrada de la nueva manufactura de Piaget, situada en Plan-les-Ouates, cerca de Ginebra.
En esta manufactura del Jura suizo, los maestros relojeros de Piaget seguían desarrollando varias líneas de movimientos mecánicos, y en 2002 presentaron uno de los calibres más elaborados de la marca, el 600P, primer movimiento de tourbillon de la manufactura Piaget y el más plano del mundo, con 3,5 mm de espesor.
El espíritu con el que Georges-Edouard Piaget había fundado su taller en el corazón del Jura seguía vivo en 2004, cuando la marca celebró su 130 aniversario. El carácter innovador por el que siempre se ha significado la firma de Côte-aux-Fées volvió a aparecer en piezas como el reloj Possession, de 2005, que complementaba la histórica primera colección joyera de la marca.
En la pasada edición del Salón de la Alta Relojería (SIHH) de Ginebra, Piaget volvió a homenajear a uno de sus clásicos con la reedición del Piaget Polo, ahora, adaptado a los gustos modernos con una caja de 45 milímetros. Era la última pieza iconográfica de una marca que puede permitirse mirar atrás sin dejar de hacerlo hacia el futuro, siempre con la intención de sorprender con sus innovadoras y vanguardistas, creaciones tanto en el campo técnico como en el estético.
Cronología
1874 - Georges-Edouard Piaget funda un pequeño taller relojero en la granja que su familia posee en la pequeña población de Côte-aux-Fées.
1943 - Gérard y Valentin Piaget, nietos del fundador, registran la marca y la manufactura empieza a comercializar relojes bajo la denominación Piaget.
1957 - Piaget lanza el modelo masculino “Emperador”, primer reloj iconográfico de la marca. Paralelamente, la casa crea el movimiento mecánico de cuerda manual Calibre 9P, de sólo 1,35 mm de espesor, el más plano del momento.
1960 - Continuando con su particular lucha para disminuir el tamaño de los movimientos,
Piaget elaboraba el movimiento automático más plano del mundo, el Calibre 12P, de sólo 2,3 mm de espesor.
1976 - Piaget lanza el Calibre de cuarzo 7P, el más pequeño de su generación.
1979 - La marca crea el modelo Piaget Polo, seguramente uno de los más emblemáticos de la marca suiza, hasta el punto que será revisado en varias ocasiones.
1980 - Piaget crea su primera colección de joyería, llamada Possession. En 2005, la colección incorporará por primera vez un reloj.
1998 - La marca vuelve a apostar por los relojes ultraplanos, con una pieza clásica y de líneas minimalistas, el famoso Altiplano.
1999 - Piaget lanza la colección Black Tie, una reedición de sus mejores piezas masculinas de Piaget, elaboradas en oro.
2001 - Piaget inaugura una nueva y revolucionaria manufactura de alta relojería en un emblemático edificio situado en Plan-les-Ouates, cerca de Ginebra.
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En 1874, Georges-Edouard Piaget fundó un pequeño taller relojero en la granja que su familia poseía en la pequeña población de Côte-aux-Fées, en el corazón del Jura suizo. Ahí empezó a fabricar movimientos relojeros de gran calidad y alta precisión, que le permitieron hacerse un nombre rápidamente en el sector relojero. Al cabo de poco tiempo, Piaget elaboraba calibres para las grandes casas de relojería suiza.
Fiel a los principios que le habían valido el reconocimiento general, y siguiendo la consigna de “hacerlo siempre mejor de lo necesario”, Piaget se caracterizó por buscar siempre la excelencia técnica, como también lo hizo Timothée Piaget desde 1911, cuando se hizo cargo del taller. Pero sería unas décadas más tarde, y con la tercera generación de la familia Piaget al mando de la empresa, cuando ésta dio el gran salto de calidad y, sobre todo, de popularidad.
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Georges-Edouard Piaget, fundador de la manufactura.
En 1943, Gérard y Valentin Piaget, nietos del fundador, decidieron registrar la marca, y la manufactura empezó a fabricar y comercializar relojes bajo la denominación Piaget. Paralelamente, los hermanos llevaron a cabo una inteligente política de expansión geográfica de la marca e implantación en el mercado, que consiguió que en poco tiempo los pedidos se dispararan. Como consecuencia de ello, al poco tiempo, la capacidad de producción de la vieja manufactura se mostró insuficiente, y en 1945 hubo que construir otra fábrica en la misma localidad.
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La familia Piaget.
Movimientos ultraplanos
Era el principio de una nueva era para Piaget. Las nuevas instalaciones, más allá de permitir el tan necesario aumento de producción, facilitaron la introducción de nuevas técnicas relojeras, que pronto empezaron a dar frutos. Así, durante la década de los 50, los relojeros de Piaget se especializaron en la fabricación de movimientos ultraplanos, otorgando a la marca un papel protagonista en la lucha para reducir el tamaño de los mecanismos: en 1957, la marca de Côte-aux-Fées logró crear un movimiento mecánico de cuerda manual, el célebre Calibre 9P, que con sus 1,35 mm de espesor se convirtió en el más plano del momento. Tres años más tarde, Piaget elaboraba asimismo el Calibre 12P, de 2,3 mm de espesor, que fue en aquel momento el movimiento automático más plano del mundo.
http://www.inforeloj.com/spa/item/resource/historia_piaget/9p_625.jpg
Calibre extraplano 9P, de sólo 1,5 mm de grosor. Creado en 1957, era el más plano del momento.
Esta pequeña revolución en el interior de los relojes tuvo su traducción en el exterior. Es en esta época cuando Piaget empieza a lanzar relojes con diseños propios realizados exclusivamente con materiales nobles, como el oro de 18 quilates o el platino. La introducción del reloj joya suponía trasladar a la caja la sofisticación formal que Piaget ya había alcanzado con sus calibres; después del reloj moneda, el reloj anillo, el reloj broche y el reloj pulsera, en 1957 Piaget lanzó el modelo masculino “Emperador”, seguramente el primer reloj iconográfico de la marca.
Con el éxito obtenido con este lanzamiento, la firma afirmaba aún más su introducción en el mundo de la joyería. Para ello, fue crucial también la apertura de una nueva manufactura en Ginebra, especializada en este sector. La capacidad de la marca para producir calibres extraplanos facilitaba la elaboración de cajas más pequeñas y ligeras, más adecuadas para la función de reloj-joya, mientras que la posibilidad de contar con una manufactura exclusivamente dedicada a la joyería permitía a sus diseñadores explorar nuevas y revolucionarias formas.
Joyeros de la relojería
Así, a punto de acabar la década de los 50, Piaget ya había adquirido la imagen que la ha hecho famosa, como marca iconográfica en la industria del lujo y la precisión. Significativamente, en 1959 la marca inauguraba su primera boutique en la prestigiosa Rue de Rhône ginebrina.
Con la década de los 60, llegaron las grandes creaciones de Piaget; en 1964, la marca sorprendía al mundo de la relojería con una colección de relojes que por primera vez incorporaba esferas de color con piedras semipreciosas como el lapislázuli, el jade, la malaquita, el ópalo, el ónix, la turquesa o el ojo de tigre. Además, la firma se especializó en los engastados de diamantes y piedras preciosas, lo que se convertiría pronto en una de sus marcas de fábrica.
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Reloj de la colección joyera Limelight.
La llamada revolución del cuarzo de principios de los 70 cambió para siempre la industria de la relojería, y Piaget no fue ajena a este fenómeno. Los nuevos calibres, aún más planos, aumentaban aún más las posibilidades de diseño, y la marca de Côte-aux-Fées aprovechó la oportunidad para consolidarse aún más en el sector del reloj joya. Tal como había sucedido en el ámbito de los movimientos mecánicos, la firma fue pionera en el diseño de mecanismos ultraplanos de cuarzo, como demuestra el lanzamiento, en 1976, del Calibre 7P, el más pequeño de su generación.
Durante todo este tiempo, Piaget acabó de consolidar su imagen como marca clave en el ámbito de la relojería de moda, gracias a la combinación única entre la alta relojería y la joyería, y cada vez eran más las boutiques que permitían descubrir sus exclusivas piezas en todo el mundo. El atrevimiento en los diseños se acentuaba, y la firma se confirmó como pionera a la hora de explorar nuevas vías para convertir al reloj en una obra de arte contemporáneo. Esta línea vanguardista llegaría a su punto culminante en 1979, con el lanzamiento del que es seguramente es uno de los modelos más emblemáticos de la marca suiza, hasta el punto que Piaget lo ha recuperado en varias ocasiones: el Piaget Polo.
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La colección Polo es una de las más famosas de la firma.
Bajo la dirección de Yves Piaget, la marca demostró, durante la década de los 80, que tenía el camino perfectamente marcado, y en 1986 cultivó otro éxito con la comercialización de la serie Dancer. Era el preludio de otro salto para la firma, que en 1988 se unió a varias industrias del sector del lujo para formar el que, más tarde, se conocería con el nombre de Richemont, sin duda uno de los grupos más importantes del mundo de la relojería. Ello trajo cambios a la casa, aunque sin dejar de lado los orígenes y la filosofía de la marca. Así, en 1990, Piaget lanzó su primera colección estrictamente joyera, llamada Possession. Aprovechando el conocimiento adquirido en el arte del engastado, la marca presentó una serie de piezas vanguardistas e innovadoras, que se sucederían durante esa década con colecciones como Miss Protocole (1998) o Limeligh.
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Yves Piaget, Presidente actual de la marca
En el ámbito de la relojería, Piaget volvió a apostar por los relojes ultraplanos, con una pieza sorprendentemente clásica y caracterizada por la pureza de líneas y un diseño minimalista: el famoso Altiplano, comercializado en 1998. Un año más tarde, la marca recorría a uno de sus modelos icónicos de los años 50, el Emperador, para dotarlo de los movimientos más sofisticados de la manufactura.
Finalmente, Piaget lanzó en 1999 la colección Black Tie, una reedición de sus mejores piezas masculinas que mostraba la maestría adquirida por los relojeros de la marca de Côte-aux-Fées durante el siglo que terminaba, a la hora de realizar los más complicados movimientos. Como característica principal, todos los modelos estaban elaborados exclusivamente en oro de 18 quilates –en sus varias tonalidades- y muchos de ellos, por supuesto, embellecidos con diamantes y piedras preciosas, acuradamente engastados por los maestros joyeros de la casa.
El nuevo milenio empezó con fuerza para Piaget, que inauguró en 2001 una nueva y revolucionaria manufactura de alta relojería en un emblemático edificio situado en Plan-les-Ouates, cerca de Ginebra, cuya estructura se inspira en las formas de un reloj.
La nueva fábrica, en cuyas instalaciones se realizan más de 40 oficios de la relojería, nacía con la misión de complementar el trabajo de la manufactura de la Côte-aux-Fées y hacer frente a la nueva expansión de la marca. En sus dos grandes naves de producción, de 2.628 y 1.124 m2 de superficie, se transfirió el conjunto de las actividades y procesos de producción de Piaget, además de un taller dedicado a la fabricación de prototipos y un servicio posventa. Como muestra del carácter dual de la firma a lo largo de la historia, la producción estrictamente relojera convive con la creación de joyas de alta relojería. Sin embargo, el diseño y fabricación de movimientos, principal actividad de Piaget y su buque insignia, sigue teniendo lugar en la sede histórica de la Côte-aux-Fées.
http://www.inforeloj.com/spa/item/resource/historia_piaget/Edificio_entrada_625.jpg
Entrada de la nueva manufactura de Piaget, situada en Plan-les-Ouates, cerca de Ginebra.
En esta manufactura del Jura suizo, los maestros relojeros de Piaget seguían desarrollando varias líneas de movimientos mecánicos, y en 2002 presentaron uno de los calibres más elaborados de la marca, el 600P, primer movimiento de tourbillon de la manufactura Piaget y el más plano del mundo, con 3,5 mm de espesor.
El espíritu con el que Georges-Edouard Piaget había fundado su taller en el corazón del Jura seguía vivo en 2004, cuando la marca celebró su 130 aniversario. El carácter innovador por el que siempre se ha significado la firma de Côte-aux-Fées volvió a aparecer en piezas como el reloj Possession, de 2005, que complementaba la histórica primera colección joyera de la marca.
En la pasada edición del Salón de la Alta Relojería (SIHH) de Ginebra, Piaget volvió a homenajear a uno de sus clásicos con la reedición del Piaget Polo, ahora, adaptado a los gustos modernos con una caja de 45 milímetros. Era la última pieza iconográfica de una marca que puede permitirse mirar atrás sin dejar de hacerlo hacia el futuro, siempre con la intención de sorprender con sus innovadoras y vanguardistas, creaciones tanto en el campo técnico como en el estético.
Cronología
1874 - Georges-Edouard Piaget funda un pequeño taller relojero en la granja que su familia posee en la pequeña población de Côte-aux-Fées.
1943 - Gérard y Valentin Piaget, nietos del fundador, registran la marca y la manufactura empieza a comercializar relojes bajo la denominación Piaget.
1957 - Piaget lanza el modelo masculino “Emperador”, primer reloj iconográfico de la marca. Paralelamente, la casa crea el movimiento mecánico de cuerda manual Calibre 9P, de sólo 1,35 mm de espesor, el más plano del momento.
1960 - Continuando con su particular lucha para disminuir el tamaño de los movimientos,
Piaget elaboraba el movimiento automático más plano del mundo, el Calibre 12P, de sólo 2,3 mm de espesor.
1976 - Piaget lanza el Calibre de cuarzo 7P, el más pequeño de su generación.
1979 - La marca crea el modelo Piaget Polo, seguramente uno de los más emblemáticos de la marca suiza, hasta el punto que será revisado en varias ocasiones.
1980 - Piaget crea su primera colección de joyería, llamada Possession. En 2005, la colección incorporará por primera vez un reloj.
1998 - La marca vuelve a apostar por los relojes ultraplanos, con una pieza clásica y de líneas minimalistas, el famoso Altiplano.
1999 - Piaget lanza la colección Black Tie, una reedición de sus mejores piezas masculinas de Piaget, elaboradas en oro.
2001 - Piaget inaugura una nueva y revolucionaria manufactura de alta relojería en un emblemático edificio situado en Plan-les-Ouates, cerca de Ginebra.